Apenas dos meses después de su apertura, Apple ya está en proceso de expandir su centro de Investigación y desarrollo en la ciudad de Herzlyia. Con más de 700 trabajadores en Israel, el centro de Herzliya es el segundo más grande de la manzana en el mundo, pero según los medios locales, la compañía va a ocupar más espacio en el mismo edificio para que los ingenieros puedan trabajar más cómodamente en él.
Las instalaciones son también una de las más ecológicas construidas hasta el momento por Apple, y de las más verdes de todo el país. Los paneles solares del techo proporcionan suficiente energía para suministrar a todo el edificio de agua caliente; y un sistema de iluminación inteligente reduce el consumo en un 25% apagando las luces automáticamente cuando la gente abandona una estancia. Además, el aire acondicionado también consume un 40% menos que los sistemas equivalentes.
El edificio es tan verde de hecho, que es uno de los candidatos para la certificación LEED de edificios sostenibles promovido por el US Green Building Council para reconocer las mejores prácticas de construcción y diseño ambientales.
Aunque la presencia de Apple en Israel se remonta tan solo a unos pocos años atrás, el país ha cobrado una gran importancia para la compañía, y a mediados de febrero, Tim Cook apareció frente a los trabajadores de la manzana en Herzliya para dar un discurso que también iba dirigido a los 6000 desarrolladores de apps para iOS que viven en la región.
“Apple está en Israel porque el talento en ingeniería que hay aquí es increíble. Sois increíblemente importantes para todo lo que hacemos y todos los productos que creamos.”
Al parecer, Apple sigue asimilando en su estructura sus últimas adquisiciones, especialmente al equipo de LinX, la start-up de fotografía digital con la que se hicieron a mediados de mes, pero a pesar de ello, está demostrando un apetito voraz contratando a nuevos ingenieros, muchos de ellos para cubrir puestos relacionados con su último producto, el Apple Watch.
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