Las palabras de la joven Ana Frank regresan a la gran pantalla en formato animado de la mano del director Ari Folman. Esta es una de las mejores noticias que podríamos recibir los seguidores del mundo del cine.
A pesar de que se trata de una historia que ha sido contada en innumerables ocasiones en televisión, cine o teatro, nunca había sido llevada a la dimensión virtual, y es que sin duda es una de esas historias imprescindibles que debía estar presente en formato animado desde hace ya algún tiempo.
Nuestro director se atreve con una apuesta interesante y quizá algo arriesgada pero a la vez estimulante, sobre todo por el nuevo enfoque desde el punto de vista técnico y creativo que va a recibir.
El israelí Ari Folman, director de obras como Waltz with Bashir o The Congress apuesta por una de las experiencias más devastadoras de la segunda guerra mundial para empatizar con la fibra más sensible de los espectadores. Esta versión será una especie de formato híbrido y punto de unión entre la animación 2D y el stop-motion.
El lenguaje visual se manifestará a golpe de metáforas y alegorías visuales para hacernos escuchar la voz de la niña, una de las víctimas del desastre nazi. Según el sitio web Cinemascope, “Kitty”, la amiga imaginaria de la joven Ana y a la que nombra continuamente en su diario, será representada como un ser humano, una joven de aquel momento que incluso visitará la casa de la joven en Amsterdam.
A continuación les dejamos con algunas muestras del proceso de rodaje y algunas ilustraciones. Esperaremos impacientes recibir nuevas noticias de lo que seguro será uno de los fenómenos del próximo año en materia de comunicación. Sin duda El diario de Ana Frank es una de esas historias que deberán reinventarse continuamente y de la mano de las nuevas posibilidades y avances tecnológicos.
Se trata de un relato y una experiencia vital imprescindible en la historia de nuestra literatura universal. Una oportunidad para rendir tributo a una familia interrumpida por los caprichos de la política, a millones de personas que vivieron el infierno en primera persona mientras observaban como su dignidad se debilitaba poco a poco. Una oportunidad perfecta para fortalecer nuestra concepción del mundo y despertar conciencia moral.
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