Solo unas semanas después de la visita del Ministro de Hacienda Yair Lapid al parlamento húngaro quien, según el mismo funcionario afirmó, dio lecciones sobre el Holocausto y el antisemitismo en ese país, el gobierno húngaro parece querer renunciar a la imagen antisemita que posee: De acuerdo a los informes en los medios de comunicación estadounidenses, el gobierno húngaro quiere hacer frente a lo que considera como “falsa imagen” por no luchar frente al extremismo en el país.
Frank Comin, asesor de comunicaciones internacional del primer ministro húngaro, Viktor Orban, se dirigió al reportero de la agencia de noticias JTA, Ron Kamfias y le pidió que le explicara la “percepción desleal” de su gobierno en las actitudes hacia Judios y otras minorías.
La solicitud fue presentada por Comin a través de la firma de Relaciones Públicas americana Burson-Marsteller, contratada para cambiar la opinión pública y la opinión judía estadounidense sobre el antisemitismo en Hungría.
“El público estadounidense habla mucho sobre el racismo y el antisemitismo en Hungría”, dijo Comin en una entrevista con la agencia judía norteamericana de noticias: “Estamos tratando de tener una idea realista de lo que está ocurriendo aquí. Imposible decir que no existe (antisemitismo), pero en muchos casos el tema es simplemente inflados y no es proporcional”.
Una de las fuentes del informe sobre antisemitismo en Hungría parte del partido, Jobbik, que tiene 47 escaños en el parlamento, de los 486 escaños”.
Hungría no está satisfecha con poseer solo la ayuda de la firma de Relaciones Públicas y por esto el gobierno declaró el 2014 como “Año de la memoria del Holocausto”, que marcará 70 años de la expulsión de 450.000 Judios hungaros hacia los campos de exterminio nazis.
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