Recuerdos vividos, unos buenos y otros no, pero en fin; al final uno muestra una gran sonrisa al recordar experiencias vividas.
Narrar, compartir y convivir con seres grandes.
Protagonistas en nuestro vivir que son familia y amigos que es lo que hace posible nuestro fácil existir.
Teniendo así un alegre final que es el comienzo. Y llegando así a trascender a futuras generaciones para hacer llegar a este mismo cambio que es la vida, el don más hermoso que Dios nos ha dado.
Artículos Relacionados: