Tus ojos nuevos se pintan de azul
Todo comienza para ti
Estrenas sonrisa y huecos en los cachetes
Practicas las muecas que la vida te irá enseñando
Complaces con nada o casi nada
porque no es poca cosa llegar a este mundo
Tu frágil existencia se sostiene de un nudo
que ata tu destino a los tuyos
En tu pequeña mano aprietas algo más que el corazón de tus padres
Sabes todavía no hacer y con eso basta
lloras cuando duele
sonríes sin adulo
simplemente eres
con eso colmas todas las medidas
Qué suerte la tuya.
Quién fuera recién nacido
ser nuevamente hoja en blanco
y aprovechar todos los instantes,
comenzar sin tachaduras ni esmaltes
Pero ahora, nos toca ser pergamino
mostrar con cordura los pliegues
entreverse sin verse,
estar y no estar
Toma mi mano, que es la tuya
si alguna vez al sostenerte me caigo
recuerda que una vez, cuando tu frágil figura
conmovía mis años, te di mi más grande regalo:
amor desinteresado
Tu abuela
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