Rene del Río, además de ser amigo es un exitoso empresario teatral.
Nuestra amistad empezó cuando ambos estudiábamos en la universidad…
Después de algunos años, un día caminando por las calles de Madero en el Centro Histórico nos encontramos.
– ¿Eres Rene del Río, cierto?
– ¿Tu Nissim Mansur?
Nos dimos fuerte abrazo.
Decidimos tomar un café.
La charla verso sobre hechos, anécdotas, metas…De todo un poco.
De pronto Rene me dice:
– Pero deja que te platiqué una vivencia muy reciente.
“No recuerdo bien que sucedió el caso es que esa mañana estaba yo de pie bastante mas temprano de lo acostumbrado…
En el pequeño despacho que tengo en casa entre y tome un libro al azar…
Leí unos minutos y me fui a mi caminata diaria; sentí al poco rato que mi mente estaba mas despierta producto de mi lectura casual matinal.”
La sensación grata de haber ejercitado mi mente estaba en mí.
“Decidí probar al día siguiente, me levante un poco mas temprano, me puse a leer unos treinta minutos.
Sentí que mi mente se ejercitaba como resultado de la lectura”…
Es difícil de explicar, espero que no sea difícil de entender, el caso es que mi mente se agiliza con esa lectura diaria.
Pronto advertí que mi capacidad de análisis y entendimiento en la mañana temprano es mejor. Que en esos momentos mi mente esta mas lucida”…
En mí ya es un hábito diario que disfruto mucho…
A mí particularmente, me intereso el hecho y con cierta inquietud busque al respecto, lo que encontré me sorprendió gratamente:
Encontré que, no existe límite límite de edad para lograr una mejoría en cuanto a rendimiento intelectual…
Que solo utilizamos una ínfima parte de los recursos de nuestro cerebro…
Que la voluntad es más fuerte que los estados de ánimo…
“Hay una fuerza motriz más poderosa que el vapor, la electricidad y la energía atómica. Esa fuerza es la voluntad”
Dijo Albert Einstein.
El leer temprano como una disciplina mañanera es muy agradable y puede resultar muy provechoso para la vida diaria…
Yo lo voy a intentar…
Artículos Relacionados: