“A quién le importa si es linda? Ayelet Shaked es peligrosa ,” es el titular de un artículo publicado el 14 de mayo en el periódico israelí Haaretz.” El “The Daily Beast, ” en Estados Unidos, tituló uno de sus artículos: “La mujer más peligrosa en la política israelí;” mientras que la revista “Foreign Policy” de manera más sutil titulo su artículo “Ayelet Shaked hace que al lado suyo Benjamín Netanyahu parezca liberal. Y ahora es la ministro de Justicia “.
De hecho la ministro de 39 años- en lo que el “New York Times” llamó “el nombramiento más polémico en un muy criticado nuevo gobierno “- comentó en una entrevista que “la mayor sorpresa con la cual se encontró en la vida pública fue el volumen del odio.”
La señora Shaked, quien fue elegida miembro de la Knesset en el 2013, atrae esta atención sobre sí misma por ser una política diligente y ambiciosa, quien ha criticado duramente a las leyes vigentes y al establecimiento legal.
Habiendo sido miembro de Likud, el partido del primer ministro Netanyahu, mudo de afiliación porque sentía que “el Likud es llevado hacia la izquierda por todos sus líderes.”
“Queriendo pertenecer a un partido que se encuentre a la derecha de Netanyahu, uno que se basa en la Biblia y los valores judíos,” en el 2012 ayudó a planear e implementar el golpe de Naftali Bennett quien logró convertir al antiguo Partido Nacional-Religioso en “El Hogar Judío.”
Reconocida como la polemista del nuevo partido, la flamante ministro argumenta que la democracia es una “forma de gobierno en lugar de ser un componente central del estado.” La Sra. Shaked, por ejemplo, se opone a las decisiones que considera que no son determinadas por el pueblo sino por los miembros del poder judicial.
“Quienes se oponen a esta confusión de poderes”, dice, “y yo estoy supuestamente incluida entre ellos, son catalogados como “los hijos de las tinieblas ,” mientras que los que apoyan privar el derecho del público a tomar decisiones a través de sus representantes en la Knesset, son llamados “hijos de la luz. ‘”
En su cometido “para fortalecer la identidad judía” de Israel, “para el establecimiento de un estado judío fuerte y democrático”, la Sra. Shaked llega al gobierno del primer ministro Netanyahu con una extensa agenda:
- Restringir el poder de la Corte Suprema,
- Dar a los políticos más influencia en los nombramientos judiciales
- Expulsar a los solicitantes de asilo eritreos y sudaneses.
- Restablecer el departamento encargado de inculcar identidad judía en las escuelas.
- Empujar un “proyecto de ley de la nacionalidad” que consagre a Israel legalmente como estado judío.
- Limitar el financiamiento extranjeros de grupos que abogan por derechos
- Anexión de algunas de las tierras en disputa de Cisjordania.
Moshe Negbi, analista legal de Radio Israel explicó los desafíos que enfrenta la señora Shaked:
“Mucha gente piensa, y Ayelet Shaked también de buena fe lo cree, que porque fue elegida por la mayoría, los tribunales tienen que obedecerla”. “Lo que no entiende es que la democracia también lucha contra la tiranía de la mayoría, y que esto sólo es posible con un sistema judicial y un fiscal general independientes “.
De hecho las posiciones de la señora Shaked con respecto a la Corte Suprema de Justicia, por ejemplo, no son nuevas. El profesor Daniel Friedman, quien estudió en la Escuela de Derecho de Harvard y fue ministro de Justicia de Israel del 2007 al 2009, comparte muchas de las opiniones de la señora Shaked en relación al sistema de justicia.
A pesar de su paso por el ministerio, el proceso de selección judicial no ha cambiado mucho. Adicionalmente, el profesor Friedman contó en su momento con el apoyo del entonces primer ministro, algo que la señora Shaked probablemente no posee.
La ministro de Justicia llegó a su cargo como parte de un acuerdo desesperado de último minuto que salvó al Primer Ministro evitar el incumplimiento del tiempo límite establecido para la formación de un nuevo gobierno.
Según Mazal Mualem, ex corresponsal de alto nivel político de los diarios “Maariv” y “Haaretz,” “Netanyahu nunca se imaginó que se vería obligado a entregar el Ministerio de Justicia a Shaked.” De hecho la señora Mualem dice que el nombramiento de Ayelet Shaked fue tan difícil para Netanyahu que este no pudo ocultar su desdén y la ignoró por completo después de la ceremonia de juramento, no dignándose siquiera a estrecharle la mano, todo este frente a las cámaras.
En un artículo titulado “Hay muy poco que Shaked pueda hacer en el Ministerio de Justicia,” Nahum Barnea- votado como uno de los periodistas más influyentes en Israel- señala que la señora Shaked necesita el apoyo del ministro de Finanzas Moshe Kahlon quien en su acuerdo para forma parte de la coalición del primer ministro, obtuvo el derecho a veto. Luego deberá discutir sus propuestas con el fiscal general, quien en el pasado expresó sus reservas en más de tres proyectos de ley que la entonces miembro de la legislatura favorecía; y, finalmente, tendrá que asegurarse de contar con mayoría en la Knesset. En una coalición de 61 miembros, dice el señor Barnea, “eso no es una tarea fácil.”
En la práctica, ningún nuevo magistrados de la Corte Suprema será seleccionado hasta el 2017. “Incluso si hasta entonces la Sra. Shaked sobrevive en el Ministerio de Justicia, tendrá que obtener una mayoría para apoyar a su candidato.
Por otro lado, el jefe del Gobierno y la presidenta de la Corte Suprema tienen más poder en la elección del fiscal general que el que posee la ministro de Justicia.
En vista de que sus ideas y su aplicación tienen tantas posibilidades como las sostenidas por sus oponentes en el gobierno y la Knesset, ¿a que se debe que Ayelet Shaked sea considerada tan “peligrosa”?
Zehava Galon la cabeza del partido de izquierda Meretz, describió a la señora Shaked en un post en Facebook como “una político inteligente y trabajadora con opiniones nacionalistas antidemocráticas.” Otros, entre sus oponentes, la han igualmente descrito como una “estratega, centrada y anclada en lo que cree “.
Tal vez allí es donde radica su inherente “peligro.” La señora Shaked pertenece a una nueva generación de políticos dedicados, que creen en las causas que exponen y que se están posicionando para un cambio de guardia entre los políticos de Israel.
La democracia es servida cuando todas las ideas compiten entre sí, produciendo, muchas veces un consenso no intencionado. La unanimidad de ideas rara vez sirve al bien de una sociedad.
La señora Shaked aparenta ser peligrosa solamente para aquellos para quienes el respeto de ideas opuestas no es parte de lo que entienden es lo que da derecho a la democracia.
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