En las últimas semanas, Costa Rica ha sido noticia alrededor del Mundo, por el sorpresivo resultado para algunos de una Segunda Ronda electoral. En la cual, los dos candidatos que constituyen ésta contienda, son el reflejo de posiciones que se extrapolan con propuestas por un lado muy concretas, como así lo muestra el Plan de Gobierno del Partido Acción Ciudadana (PAC), dirigido por el señor Carlos Alvarado, frente a otras muy superfluas, como las del Partido Restauración Nacional (PRN), comandado por Fabricio Alvarado, que no ha podido articular una agenda o plan de gobierno. Más allá de una convocatoria de carácter fundamentalista, discriminatoria y extremadamente conservadora, frente a todos aquellos que se declaren abiertamente pro Derechos Humanos y defensores de las Minorías, más oprimidas históricamente.
Porque ha sido utilizado el nombre de Di-s, por parte de éste sector de inescrupulosos que pretenden imponer un discurso único y visión de Mundo particular, arropados en un mensaje supuestamente religioso y preponderante, que se cobija bajo un halo de odio y represión, que ya tiene más que cansada y consternada a gran parte de la población costarricense, que siempre se ha caracterizado por tratar de ser tolerante, frente a las diferencias de todo tipo. Más allá del discurso manipulador, difundido por parte de algunos administradores de la fe, como éstos.
Debido a que las empresas que se encuentran detrás de éste movimiento económico, tienen un fundamento externo muy particular, alejado de las reformas hechas por Martín Lutero y Calvino, durante los inicios del protestantismo europeo. Por tanto, no tienen nada que ver con una expresión religiosa constituida y heredada posteriormente, desde la separación con la iglesia católica en aquella época, en cuanto a una misma expresión de cristianismo. Presentándose como un hibrido que surgió de los pensamientos fundamentalistas de nuevo cuño, importados de una parte ajena a cualquier “Estado pero no de Derecho”. El cual, se presenta excluyente de todo principio de Conciencia Social, Amor al Prójimo, Libertad, Igualdad y Fraternidad.
Ésta situación que está sufriendo Costa Rica, debe ser denunciada ante la Comunidad Internacional, ya que esto no es el reflejo de la idiosincrasia costarricense y menos de la identidad multiétnica y pluricultural, que se encuentra estipulada en el Artículo Primero de la Constitución Política de este país.
Este postulado lo argumento como filósofa especialista en identidad nacional costarricense, que diferencia lo que es propio de ésta cultura y lo que no. Ya que una influencia de ésta índole, viene importada desde un sector totalmente ajeno a nuestra Nación y conformación Social Demócrata que por décadas, ha tenido un planteamiento totalmente pluralista e inclusivo en la constitución de su pensamiento, haciendo énfasis en que la Democracia de éste país, no se debe regir Nunca, ni por “mesías”, ni por “caudillos”.
Así que hoy alzo mi voz, para hacer un llamado a los Observadores y Organismos Internacionales, frente a un hecho que no me puede ser indiferente y menos, al que deba yo guardar silencio, convirtiéndome en cómplice de una nueva expresión de “Fundamentalismo con Tinte Religioso.”
Éste fenómeno, no solo tiene polarizada a la ciudadanía de Costa Rica, sino también, partida más que a la mitad a ésta población. En cuanto a defender los derechos y deberes, constituidos a través de la historia y las luchas que han conformado lo que somos en la actualidad frente al Mundo. Y que hoy más que nunca, se encuentra en peligro de radicalizarse, pero por un discurso Amañado, frente al cual, no voy a voltear mi cara, hacia otro lado, por más que me lo recomienden, aquellos que tienen a ésta “Democracia” secuestrada y herida, casi de muerte, por intereses económicos contrarios y sumamente fuertes…
A continuación se adjunta un Comunicado que se solicita ser difundido en pro de la Libertad de Expresión y la vigencia de los Derechos Humanos, dentro y fuera de Costa Rica.
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