El ultimo Bundista en Israel

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En 1870, un pequeño circulo de judíos, en Bielorrusia, decidió dar a conocer las ideas socialistas entre los judíos, en su idioma de todos los días, en idish, y empezaron a dibujar un movimiento revolucionario. En los años ‘80, ya era un movimiento en desarrollo ideológico continuo.

La inquietud de los judíos en la tensión revolucionaria rusa más el antisemitismo que crecía en la sociedad que los rodeaba y en los círculos gubernamentales combinado con la constricción social y económica en los poblados judíos –shtetl- con sus muchos habitantes, llevaron a emigraciones masivas y a la solución sionista.

Eventualmente los círculos de propagación de la ideología socialista, llegaron a la conclusión de que los trabajadores judíos podían y debían formar su propio movimiento laboral socialista en el país donde vivían: se sustituyó el ruso por el idish. El movimiento se integró al proceso concomitante del renacimiento del idioma y la cultura idish, El objetivo era obtener derechos y llevar al cabo una lucha política nacional para llegar a la emancipación civil para todos los judíos.


El siguiente paso fue fundar el Bund –Algemeyner Idisher Arbeter Bund in Lite, Poyln und Rusland. Unión General de Trabajadores Judíos en Lituania, Polonia y Rusia.- en 1897. Se identificó por su devoción al idish, por su autonomía y nacionalismo judío laico opuesto al sionismo y otros conceptos de una identidad nacional judía. También fue depositario de los objetivos y métodos del movimiento socialista ruso.

El despertar del movimiento se inició en Vilna, de allí salieron los primeros líderes del Bund, donde la proporción del proletariado judío era mayor, las fuentes de asimilación menores y el nivel cultural más alto. Su apoyo surgió de tres sectores”: 1) trabajadores de nivel alto que empezaban a tomar conciencia y cohesión como resultado de la capitalización de oficios y la desintegración de asociaciones tradicionales –jebrot-.

2) Círculos de ‘inteligentzia’ radicales que combinaban ideas revolucionarias e ideología marxista con identidad judía y responsabilidad con el proletariado.

3) la ‘semi-inteligentzia’ carente de educación escolástica formal, profundamente enraizada en la cultura judía.

En 1917 el Bund ya tenía 40 000 afiliados. Después de la Primera Guerra Mundial fue muy activo en la política de Polonia, actuó en la Internacional Socialista y contra el sionismo y la ortodoxia. Colaboro con otros partidos laboristas judíos, era la mayoría en el Consejo de Sindicatos y fue importante en el establecimiento de Cysho –organización central de escuelas en idish, al principio se opuso a la educación en hebreo, pero matizo su extremismo; aunque tenía un departamento de emigración, su principio era ‘Doycat’ –quedarse en el lugar- y no favoreció la emigración. Sin embargo, por las condiciones históricas, muchos bundistas llegaron a Estados Unidos entre las dos guerras, algunos llegaron a México y le dieron color, cultura y educación en idish a la comunidad judía.

Durante la ocupación nazi en Polonia, el Bund fue activo en el movimiento de resistencia judío; en ‘48 fue liquidado por los comunistas.

Los bundistas activos en Estados Unidos empezaron a publicar un periódico en idish en Nueva York. Unser Tzait –Nuestro Tiempo- y en 47 organizaron la I Conferencia Mundial del Bund, incluyendo afiliados de Israel. La IV fue en ’65.

Asociado a la Internacional Socialista no reconoció la importancia especial del Estado de Israel o la necesidad de la política internacional judía.

Itzhak Luden, un bundista convencido. llego a Israel en 1948 y de inmediato se sumó a la rama bundista de Israel que mantenía el periódico Lebens Frage –Preguntas Vitales-, una biblioteca en idish, un coro, un circulo dramático y un grupo de ayuda mutua. En sus principios también contaba con un campamento de verano y una escuela en idish.

Luden empezó su carrera de periodista en el semanario en idish, Letzte Nayes- Ultimas Noticias- “para los sobrevivientes del Holocausto, dijo, este periódico fue un nuevo principio.”

También escribió para el semanario Forverts, versión original en idish de Forward. Fue editor en jefe de Lebns Fragen, allí trabajo 43 años hasta que se cerró en 2014 cuando ya tenía anos de ser el único periódico en idish. Luden fue el último bundista activo en Israel.

Luden murió el 4 de noviembre de 2017 por una caída.

Creyó, hasta el último día de su vida en el principio de que el destino del trabajador judío estaba ligado al destino de todos los trabajadores del país en el que vivía, por esta razón decía: “los judíos deben luchar por derechos iguales y por sus derechos nacionales en todo lugar donde haya comunidades judías.”

Itzhak Luden nació en Varsovia en 1922, estudio en una escuela laica socialista que trabajaba en idish, fue miembro del movimiento juvenil del Bund.

Al principio de la guerra, en ’39, escapo al oriente, cuando termino la guerra volvió a Polonia para saber que de toda su familia solo quedaban él y su hermano.

Benny Mer, escritor y editor dijo de Luden:” Peleó por un socialismo democrático y un judaísmo laico que rechaza el principio de ‘pueblo escogido.”

Luden dijo en una entrevista:” Nos manteníamos al día, pero éramos un movimiento de inmigrantes, llevábamos el nombre (Bund) y vivíamos en un mundo de ayer que era nuestro modelo.”

Le entristecía la declinación del idish en Israel, pero estaba orgulloso de su papel tratando de preservar su cultura mientras otros se rendían a las reglas del partido laborista que calificaba de no-democrático para los que no estaban en sus filas como los judíos del medio-oriente, los árabes y los no-sionistas como los bundistas.

En 2007 le preguntaron ¿que quedaría de la herencia del Bund en Israel en una década?”

“Su espíritu” Respondió.

 

Para leer más sobre el Bund en la actualidad, oprima aquí.

Acerca de Alicia Korenbrot

Nació en la Ciudad de México, terminó sus estudios de Filosofía en la UNAM, es Escritora y traductora. Actualemente reside en Israel.

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