“No vamos retacear el apoyo a socios capaces de lanzar ataques oportunos contra el ISIS, orealizaremos directamente tales misiones, ya sea con incursiones desde el aire o con acciones directas en el terreno”, afirmó el jefe del Pentágono, Ashton Carter, durante una audiencia ante el Comité de Servicios Armados del Senado.
Carter aseguró que se esperan más acciones como la que la semana pasada permitió liberar a decenas de cautivos del Estados Islámico en Irak, pero que dejó un soldado estadounidense muerto.
No dio detalles acerca de lo que se entiende por “acciones directas en el terreno”, pero la administración de Barack Obama ya había indicado que se opone al envío de fuerzas terrestres estadounidenses a Siria, donde ya han muerto más de 240.000 personas en la guerra que lleva más de cuatro años.
Carter centrará sus esfuerzos en el bastión del ISIS de Raqqa, en el norte de Siria, y aumentará el apoyo a los grupos rebeldes que combaten a los yihadistas.
“Esperamos intensificar nuestra campaña aérea, incluso con más aviones estadounidenses y de la coalición, con un mayor nivel de ataques contra el ISIS”, expresó Carter.
La promesa de Carter llega en momentos en que la coalición internacional liderada por los Estados Unidos, de hecho, ha realizado menos ataques en los últimos meses contra el ISIS.
Artículos Relacionados: