La gratitud es un sentimiento, emoción o actitud de reconocimiento de un beneficio que se ha recibido o recibirá. La experiencia de la gratitud ha sido históricamente un foco de las religiones del mundo y ha sido tratado de manera extensa tanto por filósofos como psicólogos. Su estudio desde el punto de la psicología hasta el año 2000, dado que la psicología ha estado más centrada en la compresión de sentimientos desagradables las emociones positivas.
El estudio de la gratitud se ha centrado en la comprensión de la experiencia a corto plazo de la emoción y más en las diferencias individuales con la frecuencia con que las personas sienten gratitud. La gratitud no es lo mismo que “la deuda moral”, a pesar de ambas se manifiestan después de recibir ayuda, la deuda moral se manifiesta cuando una persona percibe que tiene la obligación de compensar dicha ayuda.
Las dos emociones conducen a diferentes acciones, la de deuda moral puede motivar a los receptores de la ayuda y a evitar a la persona que le ha ayudado, mientras que la gratitud puede motivar en la búsqueda de su benefactor y mejorar su relación con él o ella. La gratitud puede servir para reforzar las relaciones sociales futuras de los benefactores.
Por ejemplo: un experimento demostró que los clientes de una tienda de joyas a quienes se les dio “las gracias” aumentaron en un 70% sus compras, más aquellos a los cuales no se les dio “las gracias”, no mostraron un incremento en sus compras. El vínculo entre la espiritualidad y la gratitud se ha convertido recientemente en un tema de estudio y han encontrado que no son interdependientes.
La gratitud es vista como una tendencia humana muy apreciada por todas las religiones e impregna todos los textos religiosos, las enseñanzas y tradiciones. Ante ello, la gratitud es una de las emociones más comunes a las que todas las religiones aspiran a provocar y mantener y lo consideran como un sentimiento religioso universal.
En nuestra religión, la gratitud es una parte esencial del culto y forma parte de todos los aspectos de la vida.
En Maayan Hajaim, compartimos la gratitud en múltiples maneras, en primer lugar estamos para atenderte ¡Háblanos!
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