Musulmanes en Chiapas

San Cristóbal.- En las afueras de San Cristóbal de las Casas, al final de un largo camino de terracería, indígenas tzotziles construyen una habitación. Es una mezquita. Faltan detalles para …

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Olé to Allah

On a recent crisp Friday afternoon in El Barrio, the Puerto Rican heart of East Harlem, Ramon Omar Abduraheem Ocasio, Imam of the Alianza Islamica, delivered a khutba (sermon) in …

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Albert Einstein

Uno de los científicos más fecundos, influyentes y revolucionarios del siglo XX. Sus primeros estudios los realizó en la escuela Aarón. En Zurich asistió al Politécnico y se doctoró en Ciencias Físicas en 1900.

Mishnah Avot 1:14

Es claro que no vivimos en la era mesiánica, que el mundo aun requiere de ser redimido, por lo mismo la ética judía busca solucionar problemas asociados con la falta de moral, la maldad, la arrogancia, el abuso y el enojo diseñando estrategias capaces de solucionar conflictos causados por la falta de un mundo ideal. En la Hagadá de Pésaj releemos cada año la historia de los cuatro hijos: el bueno, el malo, el simple y aquel que no sabe preguntar.

Historias Fantásticas: Le vendo mis pecados (Segunda Parte)

Como habíamos dejado a nuestro personaje llorando en el panteón, frente a su «dizque» amigo que lo había colocado en tan tristes y desesperadas circunstancias, permítanme decirles que esto no era nada en comparación con lo que le esperaba. Resulta que días después se le ocurrió tratar de hacer lo mismo que habían hecho con él o sea él trataría de vender sus pecados a alguien más a cambio de bienes materiales, pero que creen queridos lectores, como ya era de sobra demasiado conocida su historia nadie quería comprar dichos pecados y es más al tratar de hacerlo cometía el pecado de la mentira que se iba agregando a la lista ya existente porque recordarán que por ambición de ser hombre rico había aceptado el trato de cargar con los pecados del otro. ¿qué hacer…?

Ardon Mordecai

Su caminar artístico comprende desde la modernidad europea hasta el nacimiento de Israel como estado, momento más que especial para “nacer de cero” y poner las bases del arte “que se quiere pero no se tiene”. En este gigantesco paso, ser partero de las artes de todo un estado, Mordecai está considerado como un patriarca de las artes y no sólo en Israel. En el V Congreso Sionista en Basilea, el escultor Boris Schatz y Theodor Herzl, creador del sionismo moderno del que surgió el Estado de Israel, plantearon al problema del arte en el futuro Estado y como favorecer el nacimiento de una nueva visión artística con génesis en la historia y tradición judías. Para ello desarrollaron el proyecto de la Escuela de Arte Bezalel, bautizada así por el primer artesano que aparece en la Torá. Con el tiempo, Ardon Mordecai dirigiría esta institución.

Más de Amorita

“Cuando Amorita descubre las infidelidades de su marido, sus hijos varones, Amadis y Orlando, estaban en plena adolescencia y no hay jueces más duros que los chicos de esa edad. Y si a ello agregamos la insidia de la madre predisponiéndolos contra el padre y que éste, además de dominante es injusto, tramposo y mentiroso con sus hijos, hasta en los juegos más inocentes, podrás imaginar la dimensión del odio filial hacia su progenitor. En cuanto a Irene, la hija mayor, siempre amó al padre y culpó a la madre de los traspiés dados por él. El resultado de ello: la hija soltera en Nueva York, dirigiendo una empresa de moda, o algo por el estilo, y los hijos viviendo en un yate en Montecarlo, después de haber fracasado en sus matrimonios, pues la madre, acostumbrada a dirigir todo, también lo quiso hacer con sus vidas, con sus nueras y nietos y, cuando la primera nuera se negó a seguir fielmente sus lineamientos, Amorita decidió que ella No… era lo conveniente para su hijo, e hizo todo lo posible por hundir su matrimonio, hasta que lo logró. Y, cuando la segunda nuera se rebeló, no tardó en torpedearla hasta lograr la separación. El resultado de todo ello fue que Amorita, representando el papel de víctima, traicionada por el marido y después ignorada y ofendida por nueras y consuegras quedó, como el gigante egoísta del cuento dueña absoluta del castillo, pero sola, (que es lo que estuvo deseando siempre, quizás).