½ manojo de cebollitas de cambray o cebollín verde picado
1 cucharadita de hojuelas de chile seco
2 cucharaditas de sal
1 cucharadita de pimiento blanca
Aceite de ajonjolí
Modo de preparación:
Mezclar la maicena, el agua y el vino para cocinar en un tazón hondo hasta disolver todos los grumos y lograr que se forme una mezcla con una buena consistencia.
Revolver las alitas en la mezcla y cubrir cada alita asegurándose que queden perfectamente cubiertas por todas partes.
Calentar aceite de oliva en un sartén y freír de 5 en 5 las alitas para que se puedan dorar bonito sin que se quemen. (de 10 a 12 minutos)
Sacar las alitas y secarlas con rollo de servilleta de papel para extraer el exceso del aceite
Aparte en otro sartén calentar el aceite y freír rápidamente la cabeza de ajo picado, la cebolla finamente cortada y las hojuelas de chile rojo seco hasta que los aromas se sientan fragantes y suculentos.
Agregar las aletas previamente cocinadas y espolvorear la sal y pimienta.
Finalmente agregar unas gotitas de aceite de ajonjolí y listas para disfrutar.
Si se utiliza el horno de freír, no se requiere tanto aceite se puede sólo rociar un poco de aceite de oliva y se cocina igual por 10 minutos a una temperatura de 400 G.
Artículos Relacionados: