Grado de dificultad: Medio, implica dos etapas de preparación
Porciones: 10 personas
Ingredientes:
6 pechugas de pollo hechas milanesa
6 naranjas en jugo o 1 taza de jugo de naranja artificial
½ barrita de pasta de achiote o 4 sobrecitos de achiote preparado en polvo
4 chiles guajillo cortados en cuadritos y sin semillas
1 piña cortada en cuadritos
1 manojo de cilantro picado
2 chiles jalapeños finamente picados
½ cebolla blanca picada
½ cebolla morada picada
i diente de ajo
2 cucharadas de vinagre de arroz o de naranja
Sal y pimenta al gusto
Aceite
Tortillas de maíz
Modo de preparación:
Verter a la licuadora y licuar los siguientes ingredientes: el achiote, jugo de naranja, cebolla blanca, ajo, chiles guajillo, vinagre.
Sazonar las pechugas con sal, pimenta y un poco de sazonador de carne y pollo.
Colocar las pechugas en un tazón y agregarles la salsa de la licuadora. Marinarlas por un par de horas.
Partir la piña por la mitad y pelarla. La primera mitad será para la salsa, picarla muy finamente quitándole el corazón. La segunda mitad cortarla en pedazos medianos para luego asarlos con el pollo.
En un tazón pequeño agregar la piña pequeña picada, el cilantro picado, la cebolla morada picada finamente, los chiles jalapeños picados.
Sazonar todo con sal y pimenta y mezclar todo, enfriar hasta el momento de servir.
En una sarten amplio o en el grill asar las pechugas de pollo con un poco de aceite, hasta que se marquen.
Cuando las pechugas estén listas cortar en cuadritos muy pequeños las pechugas y calentar las tortillas.
En un platón extendido poner abajo algunas de las tortillas, encima las pechugas de pollo cortadas y encima la salsa de piña preparada.
Opción B: cocinar las pechugas ya cortadas como en el punto 8. En lugar de servirlas en el platón, volverlas a cocinar con la salsa de la piña previamente preparadas. ¡una verdadera delicia!
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