Matot-Masëi: Nuestras Posesiones

“Y ganado numeroso tenían los hijos de Reubén y los hijos de Gad, excesivo – en gran medida – y observaron la tierra de Iäzer y la tierra de Giläd, que eran tierras con abundante pastura”(32,1)

Dos de las doce tribus de Israel solicitan una concesión en cuanto a la distribución de la herencia territorial. Estaban dispuestos a ceder su parte dentro de la Tierra Prometida, a cambio de asegurar sus bienes capitales –evaluados en cabezas de ganado.

Ciertamente pelearían mano a mano las guerras de conquista junto a sus hermanos. Incluso prometerán que no retornarán a sus tierras, hasta que el último hebreo se haya asentado en su respectiva parcela.


No obstante, el midrash Rabá los acusa de presentar una actitud meramente materialista:

“Tres regalos fueron creados en el mundo.

Si tuvo el mérito de acceder a ellos, tomó lo más preciado del mundo.

Tiene sabiduría, lo tiene todo.

Tiene Bravura, lo tiene todo.

Tiene riqueza, lo tiene todo.

¿Cuándo? Cuando reconoce que ellos son obsequios celestiales, pues de lo contrario, perderán todo su valor.”

Los miembros de la tribu de Reubén y de Gad – quienes marcharon al exilio en primer lugar, al final de la época del Primer Templo – “apreciaron su riqueza en demasía, y se asentaron fuera del territorio de Israel, separándose del resto de sus hermanos.”

Explica Rabí Eliyahu Dessler, ZT”L: “Los objetos que utilizamos, son “nuestros”, únicamente en sentido figurado.

Como el empleado llama a las herramientas utiliza día a día para trabajar “mías,” a pesar de pertenecer a su patrón.

En este mismo orden de ideas, el concepto de “pertenencia”, no es, sino, la oportunidad de hacer uso de un objeto para consumar un servicio a Dios.

Ciertamente los sentimientos de propiedad material y egoísmo, son necesarios en el mundo para servir de manera óptima al Todopoderoso. Para sentir de qué manera avanzamos en nuestra “empresa” y conquistamos niveles y virtudes, mas, no debemos errar en el concepto real de pertenencia.

A partir de este hecho, se derivó el error de pensar que las adquisiciones materiales tienen valor intrínseco. Pero la verdad es que no existe el concepto de posesión en el hombre, sino en aquello que logró adquirir dentro de su alma y cuerpo, es decir, la Toráh que estudió, y las buenas acciones que practicó. Pues solamente ellas serán de él por la eternidad.”

La creación tiene objetivos que lo hacen sobrepasar sus límites físicos accediendo a la realidad espiritual.

De la misma forma, lo que hemos “conquistado con el sudor de nuestra frente”, deberá perseguir ese fin. Pues cada ente de este mundo, reclama ser utilizado de manera que pueda elevarse a su estrato superior, y si no lo hace, él mismo podría conducirnos a perder nuestro mundo espiritual.

Los hijos de Reubén y de Gad erraron en la correcta concepción de la pertenencia material. Ellos consideraban que era justificable perder su parte en la Tierra Prometida – entidad espiritual por excelencia – para dedicarse a la atención de sus vastas posesiones materiales.

La Toráh nos aclara en esta oportunidad, que nunca podrá un objeto, por más valioso que sea, reemplazar a un valor espiritual por “insignificante” que parezca. Pues el valor real de nuestros recursos materiales, no va en función de cómo se valoran en el mercado, sino, en la medida que nos acercan cada vez más al Creador del universo.

Shabat Shalom

Deja tu Comentario

A fin de garantizar un intercambio de opiniones respetuoso e interesante, DiarioJudio.com se reserva el derecho a eliminar todos aquellos comentarios que puedan ser considerados difamatorios, vejatorios, insultantes, injuriantes o contrarios a las leyes a estas condiciones. Los comentarios no reflejan la opinión de DiarioJudio.com, sino la de los internautas, y son ellos los únicos responsables de las opiniones vertidas. No se admitirán comentarios con contenido racista, sexista, homófobo, discriminatorio por identidad de género o que insulten a las personas por su nacionalidad, sexo, religión, edad o cualquier tipo de discapacidad física o mental.


El tamaño máximo de subida de archivos: 300 MB. Puedes subir: imagen, audio, vídeo, documento, hoja de cálculo, interactivo, texto, archivo, código, otra. Los enlaces a YouTube, Facebook, Twitter y otros servicios insertados en el texto del comentario se incrustarán automáticamente. Suelta el archivo aquí